Cien Cebollas sin Llorar

Un ama de casa alienada y postergada por sus elecciones, sus prejuicios y el autoritarismo, experimenta una súbita “Interferencia Mágica”. Ella se coloca en la frontera que borrosamente divide la ficción de la realidad, haciendo tangible la relación de fascinación que sostiene para con el mundo que se muestra por televisión.
Una reflexión sobre el espacio que ocupa en nuestras vidas el medio de comunicación contemporáneo por excelencia. Un artefacto que, por ser tan cotidiano, hace pasar inadvertida la gran influencia que tiene en la experiencia vital de cada individuo.
Un espectáculo en que el teatro toma prestado el discurso de la tele para contar una historia avasallantemente cotidiana.
El relato se fractura en incontables fragmentos para viajar de lo familiar a lo siniestro sin escalas ni retorno.
Pura e incuestionable teletransportación. Artificialidad en estado sólido.

Este espectáculo cuenta con el apoyo de Proteatro.

Esta obra formó parte de la XII edición de la Semana del Teatro de Bragado (2008).